Saturday, April 29, 2006

el dilema, el dilema... ¿escribir o dirigir?


Siempre me piden que coloque entrevistas.
aqui va una. nueva, realizada en Bs As. El tema ahora es, al parecer, escribir o dirigir. Todo un tema. No sé si es tan verdad
q no era un escritor no tan feliz y tampoco se si soy un cineasta feliz. Tampoco tengo claro, leyendo ciertas críticas, si uno es un cineasta o un escritor. Pero, por otra parte, si uno esperara la bendición de los demás para hacer las cosas, no haría nada.

aqui va.

Un Fuguet cineasta que no era "un escritor tan feliz"

GABRIELA MAYER (DPA)
BUENOS AIRES
"Nunca quise ser escritor, me convertí en uno. En cambio siempre quise ser director de cine, desde mucho antes", admitió el chileno Alberto Fuguet a su paso por el Festival Internacional de Cine Independiente de Buenos Aires (BAFICI), donde también adelantó detalles de su próximo film, "Perdido".
El autor de "Tinta Roja" y "Mala Onda" estuvo en el BAFICI como jurado y asimismo presentó su primer largometraje, "Se arrienda". "Sin duda yo no me sentía un escritor tan, tan feliz, porque no luché por ser escritor, como que me llegó. Siento en cambio que como director he tenido que luchar, o al menos esperar", declaró en entrevista con dpa.
Fuguet logró resonancia coeditando la antología de jóvenes autores "McOndo" en 1996, que tomaba abrupta distancia del realismo mágico, y es considerado entre los autores más emblemáticos de la nueva narrativa latinoamericana, interesada en la cultura de masas. El cine ya estuvo presente por ejemplo en su última novela, "Las películas de mi vida", a la vez que tituló "Cortos" un volumen de cuentos.
Y la demorada decisión de ocupar la silla de director se vio impulsada justamente cuando visitó unos años atrás el BAFICI. "Vi un par de películas que me parecieron muy simples y me tocaron mucho, de gente mucho menor que yo, y dije basta. Tengo que aprovechar los contactos que tengo".
El autor que se crió en Estados Unidos y vive en Santiago relató que la génesis real de "Se arrienda" tuvo que ver con su propia frustración.
"La película es sobre cómo se adaptan los sueños con la realidad, qué pasa cuando uno se convierte no en lo que uno quiere ser sino en lo que uno se convirtió. Que casi todo el mundo se transforma en lo segundo, no exactamente en lo que quiso ser. Y hay una cierta edad en que uno tiene que decir 'bueno, yo ya no fui lo que quería ser, sino soy lo que soy'".
"Por suerte yo lo logré, y ahora siento que soy director de cine", manifestó risueño. "Para mí el triunfo fue hacerla, y que quedara bien", apuntó respecto de la cinta protagonizada por Luciano Cruz- Coke, en la piel del frustrado compositor Gastón Fernández, que se convirtió en un éxito de público en su país.
El trazado de paralelismos con la literatura resulta prácticamente inevitable. "En un libro de alguna manera tienes todo el dinero del mundo, es gratis, tienes todas las palabras del mundo para usar; en el cine tú tienes sólo cuatro o cinco semanas para rodar", ejemplificó. "Eso me gustó del cine, me pareció que era mucho más intenso. Por ejemplo perdí diez kilos, nunca los he vuelto a recuperar".



Fuguet, nacido en 1964, tiene pensado continuar tendiendo puentes entre literatura y séptimo arte. "De hecho ahora estoy haciendo un libro y una película que son muy distintos, pero se van a llamar igual. La película se va a llamar 'Perdido' y el libro 'Extraviado' o 'Missing'. Son historias totalmente distintas, pero vienen de la misma base".
"Me di cuenta que estaba muy interesado en el tema de perderse, de gente que se pierde, de perderse uno en la vida. Las dos tienen que ver con historias reales, pero una es mucho más real, porque es una historia familiar de un tío mío que nunca más se supo de él", la que plasmará en el papel. La otra, que Fuguet planea filmar en marzo, se basa en el libro "El empapado Riquelme", de Francisco Mouat. "Lo leí y quedé muy impactado", dijo.
Consultado acerca de qué le atrae de los personajes perdidos, el escritor, cuya infancia transcurrió en California, reflexionó: "Creo que en una época estuve perdido también. No tener un idioma, no tener una raíz, no sentirte parte de. Me doy cuenta además que yo no soy el único, la mayoría de la gente está perdida".
En cuanto a su participación en la octava edición del BAFICI, entre el 11 y el 23 de abril, Fuguet consideró "loco" haber estado hace pocos años como crítico y luego como cineasta y jurado de la competencia argentina. "Es una buena responsabilidad, es agradable, pero también es agotador, porque te pierdes el lado lúdico", opinó.
Fuguet se manifestó admirador de los cineastas argentinos Lucrecia Martel, Pablo Trapero, Ezequiel Acuña y el también escritor Martín Rejtman, entre otros. En cuanto a las películas de esta generación de realizadores, destacó que "son hechas por gente que le gusta el cine, que ya no están haciendo cine político para quedar bien, toman riesgo económico".
A su vez, Fuguet subrayó que en Chile "están ocurriendo muchísimas cosas muy rápidamente, y principalmente, más que decir si es bueno o malo, es bien diverso, se están estrenando muchísimas películas. Pero lo que más me importa a mí es que la gente las está yendo a ver", algo que antes no sucedía.
El autor elegido en 2002 para la portada de la revista "Newsweek" bajo el título "Latin Literature's New Look", expresó: "Yo no sé si McOndo existe o no, pero efectivamente los nuevos escritores jóvenes, que ya no somos tan jóvenes, todos ellos fuimos criados por el cine y algunos de nosotros hacemos películas ahora. Pero a ningún escritor nuevo latinoamericano el cine le es ajeno".
"La literatura ya no es tan famosa como antes", aseveró. "La idea del 'boom' nunca va a volver a ocurrir. Muchísimos libros salen publicados y ahora nadie se entera. Pero se está escribiendo distinto, sin duda", apuntó. "Un escritor como Roberto Bolaño o mismo Rodrigo Fresán están siendo respetados y leídos afuera y no están entregando el mensaje del realismo mágico", añadió.